miércoles, 11 de marzo de 2009

Tu eres mi vida

ROMANOS 8:37-39 "Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro".
¡OH! Señor, no llego a comprender por ese amor infinito que tienes a un pobre hombre como yo pecador. Si huyo, tu me persigues; si yo me alejo, tú te acercas; si me escondo, tú me encuentras; si peco, tú me perdonas; si dejo de amarte, tú me amas mucho mas; si caigo; tú me levantas; si dejo de creer en ti, tú si que crees en mi; si me escapo de tu presencia, vuelvo a caer en tus brazos amorosos; si me pierdo, tú me rescatas; si estoy en peligro, tú me salvas; si mi corazón se endurece como una piedra, el tuyo se derrite de amor y compasión hacia mi; si mi corazón deja de latir por ti, el tuyo palpita sin descanso desprendiendo un suave calor y abrigándome suavemente con un manto de seda; si no puedo respirar por la angustia, tú soplas aliento de vida en mi alma y me haces resucitar; si me hundo hasta el fondo de la Cienaga y del abismo, tú me elevas hasta los cielos y me pones sobre la roca; si te doy la espalda, tú acaricias mis hombros por detrás; si lloro, tú enjuagas mis lagrimas; si me hago sordo a tu voz, tu me hablas al corazón; si cierro mis ojos para no verte, tú me iluminas; si me olvido de ti, yo soy tu recuerdo eterno; si mi madre o padre me abandonan, tú me recoges; si yo me cubro con los codos ante ti, tú sigues extendiendo tus brazos hacia mi todo el día; si sangran mis heridas, tú las limpias y las curas; si no quiero saber nada de ti, es cuando mas te muestras a mi; si me vuelvo en contra de ti con odio, tú me recibes con amor; cuanto más lucho contra ti, mas amor muestras hacia mi; si no te pido nada, tu me lo das todo; si quiero morir, tú me haces vivir; si estoy en la oscuridad, tú me traes claridad; si estoy seco, tú me refrescas; si tengo sed, tu me sacias de agua fresca y calmas mi sed; si estoy sucio, tú me limpias y me lavas.
si no puedo andar, tú me llevas en tu regazo; si estoy dolorido, tú masajeas mi cuerpo y mi espíritu consuelas; si estoy débil, tú me vivificas; si soy abandonado, tú me adoptas como hijo tuyo; si no leo tu palabra, tú la derramas sobre mi como suave lluvia y me impregnas de ellas como el rocío del atardecer y el del amanecer; si mis pies están heridos y cansados del camino y no pueden mas, tú extiendes una alfombra de terciopelo para hacer el camino mas suave y menos doloroso, ¡te amo, mi Dios y Señor, mas que a mi vida!; si estoy cansado y cargado, tú coges mi carga y la llevas en tus hombros por mi; ¡eres mi vida y mi amor!; si estoy desnudo, tú me vistes con vestiduras blancas; si no quiero comer tu comida y tu bebida, tú purificas mi cuerpo; si no te pido ayuda, tú no dejas de ayudarme.
Sin ti ¿Cómo podría vivir? ¿Cómo podría morir? Sin ti, me seria imposible vivir o morir, es horrible no poder vivir a tu lado, es desesperante no poder vivir aquí y allí sin ti; si no puedo conciliar el sueño en esas inquietas noches, tú me cantas salmos al oído hasta que quedo dormido en un apacible y profundo sueño. Creo Señor, que si en estos momentos te quisiera más, mi alma se escaparía hacia tu presencia, te deseo, te amo, te anhelo, te adoro, te necesito mi amor, solo tú y yo, y yo y tu, Señor, Señor, Señor, mi todo.
Perdóname Señor mío, por no dejarme dominar por tu santo Espíritu cuando estoy en el culto de la Iglesia, tú sabes que solo ante ti me entrego incondicionalmente y totalmente, cuerpo y espíritu y alma, como si yo fuera una marioneta en tus manos, manejada a tu antojo, entonces ya no vivo yo sino Cristo en mi, es entonces cuando la realidad que hay en mi se muestra para ti Señor, es entonces cuando mi cuerpo, emociones, sentimientos, intelecto y todo el interior y exterior en uno, te rinde el culto agradable que a ti te gusta, lo se, en estos momento no hay ilusión ni falsedad, sino realidad y verdad, tú, solo tú eres lo verdaderamente importante, la sorpresa y la alegría danzan dentro de mi ser, ahora vibra un nombre alrededor de mi, “EMANUEL” Dios con nosotros, ahora es mi cuerpo el que vibra como las cuerdas de una guitarra y caigo como cuando se derrumba un gran edificio desplomándose sobre sus cimientos, tal como caigo así quedo, y mis ojos se convierten en dos torrentes de agua que recorren mi rostro hasta regar la hierva y la tierra, es como una presa que no puede contener mas la presión y se desborda, dejo de sentir, dejo de existir, no veo nada, no siento nada, no existo, lloro de alegría, lloro de tristeza, lloro de dolor y me quebranto en mil pedazos, ahora soy un bebe en la cuna que ríe mirando algo que los mayores no ven, no puedo moverme pero soy feliz, no siento el peso de mi cuerpo ni dolor ni molestia alguna, es como si yo no fuera materia física, veo imágenes mentales y rayos de luz en medio de la oscuridad, ahora vuelven los temblores en todo mi cuerpo, hasta que cesan lentamente hasta quedarme completamente relajado y sensible a todo lo que me rodea. Ahora solo existe un “Sí, mi Señor”.

1 comentario:

  1. Me he quedado sin palabras...que fluir de palabras , sinceras, tristes alegres,un poco alucinantes jajajajja...Besos para ti, y saludos de tu mujercita, Bendiciones.

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