sábado, 31 de diciembre de 2011

Dones y frutos


Dones y frutos
Dios no sólo quiere hacer grandes cosas por medio de nosotros, quiere darnos grandes cosas también.
(I) Los dones del Espíritu
Estas son las dotaciones sobrenaturales de Dios. Incluso los talentos naturales necesitan ser rendidos a Dios antes que los pueda usar plenamente
para su gloria. El Espíritu Santo es quién nos equipa para poder hacer la voluntad de Dios y para adorarle y servirle (1 Corintios 12:7). Las listas
de los dones en primera de Corintios 12:7-11 y Romanos 12:6-8 nos ayudan a entender la gama de dones disponibles para nosotros. El Padre se
ha asegurado de que a sus hijos no les falte nada de lo que puedan necesitar para llevar a cabo su voluntad y propósito, y para poder testificar
del poder de Jesús aquí en la tierra.
(II) El fruto del Espíritu
Estos son tan importantes como los dones. El fruto del Espíritu es la evidencia en nuestra vida de la obra del Espíritu Santo cambiándonos a la
imagen y naturaleza de Jesús. El testimonio de nuestra vida es muy importante. La lista del fruto del Espíritu está en Gálatas 5:22-23, y juntos,
estos son el carácter de Jesús. El Espíritu Santo siembra las semillas de sus frutos en nuestra vida. Es responsabilidad nuestra el responderle y
abrirnos cada vez más a su influencia Santa, para que lleguemos a ser cada vez más como Jesús en nuestras acciones y actitudes.

viernes, 30 de diciembre de 2011


último de la tierra.
(Hechos 1:8)
La palabra para "poder" aquí es "dunamis" que es la palabra de la cual recibimos la palabra española "dinamita". Dios quiere que seamos
llenos con ese mismo poder para que podamos testificar de la vida de Jesús; no solamente para capacitamos para hablar de Jesús, sino que también
lleguemos a ser como Jesús para otros hombres y mujeres en el poder del Espíritu Santo, será como si Jesús estuviese con ellos
(Juan 14:12).

Cuatro razones importantes del porqué todo necesitamos el poder del Espíritu Santo en nuestra vida


Cuatro razones importantes del porqué todo necesitamos el poder del
Espíritu Santo en nuestra vida
(I) Poder para llegar a ser
Sin el poder de Dios en nosotros nunca podemos llegar a ser hijos de Dios. La humanidad ha perdido camino y no reconoce a su verdadero
Padre. La obra del Espíritu Santo es la de despertar nuestra necesidad espiritual y señalamos el camino hacia Jesús, que es el camino de Dios
para que la humanidad sea traída de nuevo a El mismo (Juan 1:12-13). Con el poder del Espíritu Santo obrando en nosotros podemos llevar a
cabo lo que en nuestras propias fuerzas no podríamos hacer nunca. Podemos llegar ser hijos de Dios y actuar y vivir como miembros de su familia.
(II) Poder para llegar a ser
Tenemos poder en nosotros por medio del Espíritu Santo para nuestro vivir diario. Dios quiere que conozca su poder para que podamos vivir una vida de fe
continuamente, y llegar a ser ejemplo a los demás de lo significa vivir la nueva vida en Jesús día a día. Sabemos que la carne es débil, pero no estamos
solos. Dios ha abierto el canal de poder divino. Dios mismo mora en nuestro corazón. (Efesios 3:16-17).
(III) Poder para vencer
Todo creyente cristiano vive en una zona de guerra. Antes de convertirnos en cristianos estábamos e lado de Satanás, pero cuando escogimos seguir a Jesús
fuimos puestos en el lado ganador, el lado de (Efesios 2:1-5). La guerra que experimentamos de parte de Satanás es mucho más dura después de c porque él
está intentando detenernos de seguir a Jesús. Dios hace disponible su poder dentro de nosotros para que tengamos la fuerza y capacidad de derrotar al diablo
(1 Juan 4:4).
(IV) Poder para compartir
Recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén en todo Judea, en Samaria, y hasta lo

jueves, 29 de diciembre de 2011

La obra del Espíritu Santo en un discípulo de Jesús


La obra del Espíritu Santo en un discípulo de Jesús
Nos habilita para echar fuera demonios (Mateo 12:28).
Nos habilita para hablar como Dios querría que hablásemos (Marcos 13:11).
Nos habilita para nacer de nuevo (Juan 3:5-8).
Será nuestro consolador para siempre (Juan 14:16).
Vive en nosotros (Juan 14:17).
Nos enseña (Juan 14:26; Juan 16:13-14).
Nos convence de pecado (Juan 16:8-11).
Nos da el poder para ser testigos de Dios (Hechos 1:8).
Posibilita que el amor de Dios sea derramado en nuestro corazón (Romanos 5:5)
Da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios (Romanos 8:16).
Nos ayuda en nuestra debilidad (Romanos 8:26).
Habilita justicia y paz en nosotros (Romanos 14:17).
Nos habilita a abundar en esperanza (Romanos 15:13).
Nos santifica (Romanos 15:16).
Reparte varios dones como El quiere (1 Corintios 12:4-11).
Habilita el fruto del Espíritu en nosotros (Gálatas 5:22-23).
Habilita gozo en nosotros (1 Tesalonicenses 1:6).

miércoles, 28 de diciembre de 2011

La Biblia describe al Espíritu Santo de diferentes maneras


La Biblia describe al Espíritu Santo de diferentes maneras
(I) A través de diferentes nombres; por ejemplo:
- El buen Espíritu (Nehemías 9:20).
- El Espíritu de Dios (Mateo 3:16).
- El Consolador (Juan 14:16,26).
- El Espíritu de verdad (Juan 16:13).
- El Espíritu de Cristo (Romanos 8:9).
- El Espíritu de adopción (Romanos 8:15).
- El Espíritu de gracia (Hebreos 10:29).
(II) A través de símbolos:
- Paloma (Mateo 3:16).
- Voz (1 Reyes 19:12).
- Sello (Efesios 1:13).
- Agua y agua viva (Isaías 44:3; Juan 7:37-39).
- Viento (Hechos 2:2).
- Aceite (1 Samuel 16:13).
- Fuego (Hechos 2:3).

martes, 27 de diciembre de 2011

La Persona y la obra del Espíritu Santo


La Persona y la obra del Espíritu Santo
 Escrituras clave
Juan 14:12,15-27 Hechos 1:4-8
Juan 16:5-15 1 Corintios 2:9-16
 Introducción
El Espíritu Santo no es una vaga influencia ni una idea mística, es una persona. Esto significa que puede comunicarse y hacerse real a nosotros.
No podemos necesariamente verle, pero es real y puede impresionar mucho nuestra vida por medio de nuestro ser interior. Es el tercer miembro
de la triple divinidad. Como Dios el Padre y Dios el Hijo, el Espíritu
Santo es eterno (Hebreos 9:14), omnipresente -presente por todas partes (Salmo 139;7), omnisciente -todo lo sabe (1 Corintios 2:10), y omnipotente
-todo lo puede (Lucas 1:35). Nos muestra atributos de personalidad; intelecto (Romanos 8:27), voluntad (1 Corintios 12:11), y sensibilidad
(Efesios 4:30). El está íntimamente dentro de las situaciones de nuestra vida, comunicándose con nosotros, abriéndose a nosotros y buscando
para que nos abramos a El en respuesta. Es una persona y nos habla personalmente. Todo creyente debería conocer la realidad y poder del Espíritu
Santo, trayendo vida directamente a lo más íntimo de su ser, fuerza en su vida (Juan 7:38-39). Sin el Espíritu Santo no podríamos vivir
nunca en el poder de Dios, ni conocer la fuerza de Dios en nuestra vida cotidiana. Para pleno placer y satisfacción en nuestra existencia humana
necesitamos este gran don, el Espíritu Santo de Dios nuestro Padre.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Resumen y aplicación


Resumen y aplicación
1. Como discípulos de Dios necesitamos conocer bien las tres partes de la Trinidad; a saber: Dios el Padre; Dios el Hijo; y Dios el Espíritu Santo,
para tener un punto de vista equilibrado de Dios.
2. Nuestro Padre celestial es el perfecto ejemplo de la paternidad (Mateo 5:48).
3. Necesitamos conocer a Dios como Padre, para poder edificar nuestra vida como discípulos de Dios en fundamentos correctos, y conocer
los propósitos de Dios para nosotros como hijos suyos.
4. Para disfrutar de nuestra relación con Dios el Padre necesitamos aprender a relacionarnos y responder a sus principios, leyes, palabras y
autoridad.
5. En vista de quién es nuestro Padre celestial y lo que ha propuesto que seamos, respondamos a El con nuestro amor (Juan 14:21), adoración
(Juan 4:23-24), y en obediencia (Juan 14:15, 1 Pedro 1:2,17; Romanos 6:16-18).

domingo, 25 de diciembre de 2011

En resumen


En resumen
Muchos cristianos hoy día viven bajo una amenaza religiosa del terrible juicio de Dios. Se les ha dicho que Dios de alguna manera está
contra ellos y les está vigilando para castigar y limitar a toda hora. Dios sí que odia el pecado, pero no odia al pecador. Si Dios ama al pecador
y'se ha puesto a sí mismo a su alcance, cuanto más debe estar al alcance de nosotros los creyentes que caminamos en la Palabra de Dios y procuramos
vivir en obediencia a El (Apocalipsis 1:5-6). Jesús nos amaba como pecadores cuando vinimos a El. Sin embargo no nos dejó como
pecadores, sino que nos limpió, nos hizo reyes y sacerdotes, y luego nos presentó a Di su Padre. En aquel momento Dios se hizo nuestro
Padre. Nuestro Padre sólo puede recordarnos como sacerdotes y reyes. Jesús así lo aseguró. Incluso cuando nos metemos en un lío y pecamos,
y hacemos cos que son desagradables a Dios nuestro Padre, Jesús siempre vive para hacer intercesión por nosotros. S ministerio
como abogado está siempre a nuestra disposición para mantenernos en comunión con nuestro Padre amoroso (1 Juan 1:9; 2:1).
Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para oportuno socorro. (Hebreos 4:16)
Tenemos una invitación perpetua para entrar confiadamente al trono de nuestro Padre. Por su amor y gracia podemos hacerlo confiadamente
como un rey y no como un mendigo. Observa que somos invitados para venir obtener misericordia, no sólo la esperanza de obtenerla.
1 Juan 4:18 dice: "El perfecto amor echa fuera el temor". Necesitamos poner todos nuestros temores, preocupaciones y ansiedades en la
mano de nuestro poderoso Padre. Nos ama como hijos y herederos. No nos decepciona Quiere sólo lo mejor para nosotros y quiere que
crezcamos en madurez en El. Necesitamos confiar en nuestro Padre celestial y darle nuestro todo.

sábado, 24 de diciembre de 2011

Las bendiciones y beneficios de una relación padre/hijo


Las bendiciones y beneficios de una relación padre/hijo
1. El privilegio de adopción: (Juan 1:11-13; 2 Corintios 6:17-18; 7:1).
El Espíritu Santo tendrá mucho celo de nosotros, para prevenir que ningún rival rompa nuestra relación amistad con el Padre y su hijo
Jesús (Santiago 4:5).
2. El testimonio de adopción: (Romanos 15-16; Gálatas 4:6).
El Espíritu de Dios da testimonio a nuestro espíritu que somos hijos de Dios y por tanto Dios el Padre es nuestro Padre.
3. La herencia de adopción: (Romanos 8:17).
Podemos participar ahora, en parte, de nuestra herencia como hijos de Dios, y esto señala el hecho de que Dios es en verdad nuestro Padre; por
ejemplo la promesa del Espíritu Santo dado a aquellos que son salvo. (Efesios 1:13-14).
4. La disciplina de adopción: (Hebreos 12:7-11).
5. El amor del Padre en adopción: (Juan 16:27).
6. La provisión del Padre en adopción: (Mateo 6:8, 26,30; Juan 14:2).
7. La protección del Padre en adopción: (Juan 10:28-29; Juan 13:1).
8. La generosidad del Padre en adopción: (Lucas 12:32; Mateo 7:11).

viernes, 23 de diciembre de 2011

Comunión con Dios el Padre


Comunión con Dios el Padre
El gran plan y propósito de Dios desde el principio ha sido de traer al hombre otra vez en plena comunión consigo mismo. Toda la historia es una
exposición de este plan de redención. El verdadero desarrollo de este plan no empezó hasta que Adán pecó. El pecado rompió la relación de Dios con
el hombre, y desde entonces, el plan de redención de Dios está en marcha. Dios ama al mundo y desea salvarlo (Juan 3:16; 1 Pedro 3:20).
Jesús dijo: "Y no llaméis `padre' vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro padre, el que esta en los cielos". (Mateo 23:9). La razón de esto
es que como resultado de la caída, los padres no tienen ni las características ni la habilidad para ser los padres que Dios propuso que fueran. Por
tanto, en efecto, Jesús decía que tenemos sólo un Padre que está en el cielo, que tiene el carácter y la habilidad para ser un verdadero padre. El
carácter de nuestro Padre celestial es perfecto sin ninguna mudanza ni sombra de variación (Santiago 1:17). Su habilidad es ilimitada. A la luz de
esto, se puede confiar plenamente en el carácter de nuestro Padre celestial y depender enteramente en su habilidad. Esto no deja sitio para una
falta de confianza en Dios en cuanto a sus promesas para nosotros.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Los propósitos amorosos de nuestro Padre celestial para el hombre incluyen


Los propósitos amorosos de nuestro Padre celestial para el hombre incluyen
Siempre está dispuesto a contestar la oración (Isaías 62:24; Mateo 7:11).
Anhela que los hombres sean sus hijos (Jeremías 3:19).
Se deleita en mostrar misericordia (Miqueas 7:18).
Se propone que tengamos vida y la tengamos en abundancia (Juan 10:10).
Quiere libramos del temor (Juan 14:1; Salmo 118:5-9).
Desea dar al hombre un hogar eterno (Juan 14:2-3).
Quiere que todo hombre sea salvo (1 Timoteo 2:3-4).
Quiere cubrir nuestras necesidades (1 Pedro 5:7).

miércoles, 21 de diciembre de 2011

La paternidad de Dios es fundamental para el discipulado


La paternidad de Dios es fundamental para el discipulado
Entender esto nos habilita para entender:
- La oración, y porque Dios contesta (Mateo 7:11).
- Recibir el Espíritu Santo (Lucas 11:13).
- Nuestra adopción como hijos (Romanos 8:15; 1 Juan 3:1)
- El plan de redención (Gálatas 4:4-7).
- Nuestro acceso a Dios (Efesios 2:18).
El corazón de Dios es afectado por la respuesta del hombre a su amor paternal. Entonces experimenta anhelo (Ezequiel 22:30-31), tristeza (Jeremías 8:18;
Isaías 53:3), dolor (Génesis 6:6), ira (Apocalipsis 16:1), llanto (Jeremías 8:21), compasión (Mateo 9:36) gozo (Lucas 15:22-24), regocijo incluso con
cánticos (Sofonías 3:17).

martes, 20 de diciembre de 2011

Algunos de los nombres de Dios en el Antiguo Testamento


Algunos de los nombres de Dios en el Antiguo Testamento
La raza judía consideraba el nombre y naturaleza como sinónimos. Dios usa este entendimiento humano d significado de los nombres y lo aplica a sí
mismo para revelar su naturaleza a la gente. Comprender los nombres de Dios es comprender la revelación de Dios de Sí mismo.
1. El Elyon: el Dios altísimo; el Soberano y poseedor de los cielos y la tierra; el encargado (Génesis 14:18; 2 Samuel 22:14).
2. El Shaddai: el Omnipotente, Todopoderoso; constantemente otorgando alimentos para sus hijos y cubriendo sus necesidades Génesis 17:1).
3. Yahweh, Señor o Jehovah: El que siempre es; el constante "YO SOY"; El que existe (Éxodo 3:15; Salmo 33:1 Isaías 26:4).
4. Elohim: Dios. Este nombre nos muestra la pluralidad en un Dios. Dios dijo en Génesis 1:26, "hagamos hombre a nuestra imagen". Esto denota dos o
más en uno (Éxodo 35:31)
5. Jehovah Shammah: el Señor está allí; El está constantemente presente con nosotros (Ezequiel 48:35).
6. Jehovah Shalom: el Señor nuestra paz y totalidad (Jueces 6:24).
7. Jehovah Jireh: el Señor proveerá para nosotros (Génesis 22:14).
8. Jehovah Nissi: el Señor nuestra bandera y victoria (Éxodo 17:15).
9. Jehovah Tsidkenu: el Señor que nos viste con su justicia; el Señor nuestra justicia (Jeremías 23:6, Jeremías 33:16).
10. Jehovah Rophe (rapha): el Señor que nos sana (Éxodo 15:26)
11. Jehovah Ro-hi (ra ah): el Señor nuestro pastor amoroso que nos guía (Salmo 23:1).
12. Jehovah Mekadish-kem: el Señor que nos santifica (Éxodo 31:13).
13. Jehovah Yasha-Gaal: el Señor nuestro salvador y redentor (Isaías 49:26; Isaías 60:16).
14. Adonai: mi Señor (Génesis 15:2; Deuteronomio 9:16; Salmos 51:15)
15. Tsur: Roca (Isaías 44:8).

lunes, 19 de diciembre de 2011

Dios es nuestro Padre perfecto


Dios es nuestro Padre perfecto
Aconseja (Salmo 73:24).
Protege (Salmo 91 Juan 10:27-29).
Nos da descanso (Mateo 11:28-29).
Es paciente (Mateo 18:26-27).
Nos ama (Juan 3:16).
Nos labra y poda (Juan 15:1-2).
Es justo (Juan 17:25).
Es misericordioso (Romanos 9:15).
Nos moldea y forma (Romanos 9:20-21).
Es eterno (Romanos 16:26).
Es compasivo (2 Corintios 1:3).
Consuela (2 Corintios 1:3-4).
Nos bendice con toda bendición espiritual (Efesios 1:3).
Es misericordioso y nos da paz (2 Timoteo 1:2).
Es fiel (2 Timoteo 2:3).
Corrige y disciplina (Hebreos 12:5-11).
Es imparcial (no tiene favoritismo) (1 Pedro 1:17).
Provee (1 Pedro 5:7; Mateo 6:33).
Perdona (1 Juan 1:9).
Es amor (1 Juan 4:8).
Es Santo (Apocalipsis 16:5).
Es verdadero y justo en juicio (Apocalipsis 16:7).

domingo, 18 de diciembre de 2011

Maneras para comprender y conocer la paternidad de Dios


Maneras para comprender y conocer la paternidad de Dios
(I) Dios se revela a Sí mismo en muchas maneras, p. ej. por medio de los profetas (Hebreos 1:1), por medio de la creación y por medio de su
Palabra, la Biblia.
(II) Jesús reveló la paternidad de Dios mientras estaba en la tierra, especialmente su amor, unidad y autoridad (Juan 14:6-11).
(III) Nuestro padre humano nos muestra sólo una representación imperfecta de cómo es Dios el Padre, pero Dios es el autor de toda paternidad (Efesios 3:14-
15), y por tanto nuestros padres humanos pueden reflejar algo de Dios el Padre.
(IV) El Espíritu Santo es un don de Dios el Padre para nosotros y nos revelará a Dios el Padre (Juan 14:26).

sábado, 17 de diciembre de 2011

Dios el Padre: Parte de la Trinidad


Dios el Padre: Parte de la Trinidad
Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo son las tres partes o personas de Dios. Están en unidad porque son uno y entonces actúan como uno.
Dos ilustraciones que nos ayudan a comprender el concepto de un Dios con tres partes son:
(I) Una persona: con el Padre como el cuerpo, Jesús como la mano derecha y el Espíritu Santo como la mano izquierda. Las manos hacen el ministerio
del Padre aquí en la tierra pero ninguna parte se juzga mayor que la otra.
(II) Una manzana: que tiene un corazón (Dios el Padre), pulpa (Dios el Hijo) y piel (Dios el Espíritu Santo). Una manzana con tres partes.
Si nos concentramos en un solo aspecto de la Trinidad, no sólo no entenderemos los otros dos, sino que ni siquiera entenderemos aquel en el que estamos
concentrados.

viernes, 16 de diciembre de 2011

La paternidad de Dios


Escrituras clave
Juan 14:6-11 Santiago 1:17-18
Efesios 1:17-23 Lucas-15-11-32           Podemos llamar a Dios, Padre nuestro porque somos adoptados en su familia como sus hijos. Esto es principalmente un concepto del Nuevo
Testamento. Mientras que el poder y divinidad eternos de Dios son manifiestos en la creación y generalmente en el Antiguo Testamento, su paternidad
es, en su mayor parte, el tema que se revela en el Nuevo Testamento. Esto se demuestra claramente cuando nos damos cuenta de que se refiere a
Dios como Padre sólo quince veces en el Antiguo Testamento y doscientas cincuenta y cuatro veces en el Nuevo Testamento. La palabra "padre" en
griego es "pater" que viene de una palabra radical que significa nutridor, protector y defensor. Necesitamos conocer a Dios como nuestro Padre
para poder tener una visión equilibrada de El.

jueves, 15 de diciembre de 2011

En resumen


En resumen
Estamos ahora en la familia de Dios por fe. Compartimos en la vida de Cristo y en la herencia de los Santos. Nos ha sido dada una gran
motivación para vivir en santidad y experimentamos el poder transformador del Espíritu Santo en nuestra vida. Porque conocemos a quién
pertenecemos podemos comprender la disciplina de nuestro Padre en nuestra vida, y sobre todo, vivimos con una experiencia profunda y
afectuosa del amor del Padre en nuestro corazón (Efesios 1:3).

miércoles, 14 de diciembre de 2011

El ejercicio de nuestra adopción


El ejercicio de nuestra adopción
Dios quiere que vivamos en lo bueno de nuestra adopción. Saber una verdad y no vivirla, no hará que la verdad sea real para nosotros. Por el
Espíritu Santo nos ha sido dado todo lo necesario para hacer esta verdad efectiva en nuestra experiencia cotidiana (2 Pedro 1:3).
Una última verdad de nuestra adopción es que Dios sí que nos trata como hijos, no como a parientes lejanos. Esto significa que de vez en
cuando conoceremos la mano de disciplina del Padre en nuestra vida, corrigiéndonos y recordándonos nuestras responsabilidades como hijos
(Hebreos 12:7-11).

martes, 13 de diciembre de 2011

El principio de nuestra adopción


El principio de nuestra adopción
La esencia de nuestra vida como discípulos es que somos llamados para vivir diariamente el sencillo principio de confianza y franqueza que
existe entre un padre y su hijo verdadero. El secreto del poder visto en Jesús era su relación con su Padre. En el Sermón del Monte Jesús
introduce a sus seguidores en algunos secretos del Reino de Dios. Les enseña a confiar en su Padre y a vivir una vida para su gloria y honra.
- Glorificar al Padre (Mateo 5:16).
- Imitar al Padre (Mateo 5:44, 45, 48).
- Hablar con el Padre (Mateo 6:7-9).
- Confiar en el Padre (Mateo 6:25-26).
- Agradar al Padre (Mateo 6:17-18).

lunes, 12 de diciembre de 2011

La promesa de nuestra adopción


La promesa de nuestra adopción
Como hijos del Reino hemos sido adoptados en la tremenda promesa de que la salvación no es solamente p ahora, ¡sino para siempre! (Romanos
8:17). Nuestra adopción es eterna. Esta es la motivación de nuestro serví al pensar con mucha ilusión, como lo hizo Pablo, en la corona de justicia que
está preparada para nosotros al final de nuestro camino. También es la motivación para nuestra santidad (1 Juan 3:2-3). En Cristo no sólo tenemos
nueva vida, sino también una nueva esperanza. No sólo tenemos el derecho de llegar a ser hijos de Dios, s además tenemos el derecho de recibir
la herencia como hijos propios de Dios.

domingo, 11 de diciembre de 2011

El propósito de nuestra adopción


El propósito de nuestra adopción
El propósito que el Padre tiene al adoptarnos como sus hijos es el de "ser santos y sin mancha delante de E (Efesios 1:4). A través de la adopción,
no sólo compartimos en la familia, sino también en el carácter de nuestro Padre. Este es el verdadero propósito y llamamiento del discipulado, que lleguemos
a ser como El en nuestras acciones actitudes, y que nuestra vida refleje el hecho de que somos hijos de nuestro Padre celestial. En Jesús, Dios ha
revelado el anteproyecto para cada hijo que le siga por fe. Es su propósito que lleguemos a ser como Jesús en todo nuestro vivir y en el compromiso de
nuestra vida con el Padre (Romanos 8:29). Pedro nos recuerda que esto no es solamente llamamiento de Dios en nuestra vida individual, sino
que el propósito de Dios al escogernos es que lleguemos a como un cuerpo de personas que refleje esta misma naturaleza en nuestra vida juntos (1 Pedro
2:9).

jueves, 8 de diciembre de 2011

El poder de nuestra adopción


Un niño humano adoptado recibe un nuevo nombre. Toma el nombre de sus nuevos padres y también toma todos los privilegios y potencial de su familia
nueva. Este también es el caso para nosotros en Cristo (1 Pedro 2:10). En el primer capítulo del evangelio de Juan, éste recalca el hecho de que
no somos hijos en la familia de Dios por ningún derecho o poder que tenemos a nivel humano. Nacemos naturalmente fuera de la familia y vida
de Dios. "Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados
de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios" (Juan 1:12-13). La Palabra traducida "potestad" es una palabra griega
"exousia" la cual significa "autoridad" o "poder". Es una palabra de autoridad inalienable. Este derecho o potestad ha sido ganado para nosotros
por medio de la muerte del Señor Jesús y ha sido dado a cada uno de nosotros por medio de la fe. A través de ello hemos entrado en todos los derechos
y herencias de estar en la familia de Dios (Gálatas 4:6). Se describe al Espíritu Santo como "el Espíritu de adopción", su labor es traer a
nuestro corazón la certeza o realidad de pertenecer a Dios. Es esta certeza la que opera como un fundamento tan fuerte para nuestra vida
cotidiana como cristianos. Tal fuerza y poder proviene de conocer quién somos y a quién pertenecemos.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

El plan de adopción

 Esta idea de adopción revela el corazón de nuestro Padre celestial. Planeó hace mucho adoptarnos en Cristo (Efesios 1:4-5). ¡Ninguno de los que hemos
nacido en la familia de Dios lo hemos hecho por casualidad! Dios lo tenía en su corazón antes de la fundación del mundo (Salmo 139:13-16; Efesios
2:10). Si nos pudiéramos agarrar plenamente a esto, nos libraría de tantas ataduras a las que estamos sujetos, nos habilitaría para estar de pie en la libertad
que pertenece a los que conocen el poder de sus derechos de nacimiento. Nosotros no tomamos linaje de cualquier descendencia humana. ¡Tomamos
nuestro linaje de los propósitos de Dios, en Cristo Jesús, antes de la fundación del mundo! Fuimos escogidos en El. ¡Y es de esta fuente que tomamos
todo el poder de nuestra nueva vida en El!

martes, 6 de diciembre de 2011

Justificación


Justificación     Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. (Romanos 5:1)
Esto es un principio fundamental de salvación. Tiene un significado legal en que estamos situados ante Dios que es juez de un tribunal, y aunque
somos hallados culpables por nuestro pecado, somos declarados inocentes por la fe en Jesucristo. La justificación es "Ahora, pues, ninguna condenación
hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en
Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte", porque el castigo que yo debía fue llevado por Cristo Jesús (Romanos 8:1-2)

lunes, 5 de diciembre de 2011

Adopción como hijos


Adopción como hijos      Introducción
En el corazón del discipulado está la idea de pertenencia. Esto es un compromiso para toda la vida, y la vida del discípulo llega a estar íntimamente
involucrada con aquel al que está siguiendo. Existe la idea de elección por ambas partes. El maestro escoge a los discípulos (Juan 15:16), y luego
nosotros debemos elegir: o responder y seguirle, o no. Jesús nos ha escogido y su elección exige una respuesta por nuestra parte. Podemos aceptar que
nos ha escogido y seguirle a El, o podemos rechazar que nos ha escogido y rechazarle a El. Cuando aceptamos a Jesucristo como nuestro Señor y
Salvador nacemos de nuevo (Juan 3:5-6). Esta imagen del nuevo nacimiento es una analogía muy poderosa porque es exactamente lo que pasa en
términos espirituales cuando venimos a Cristo en fe. Es un nuevo principio: todos los factores negativos antiguos que nos mantenían en esclavitud son
vencidos a través del poder del Espíritu Santo, nuestros pecados son perdonados y somos llevados a una nueva relación con Dios (2 Corintios 5:17).

domingo, 4 de diciembre de 2011

Un conocimiento renovado


Un conocimiento renovado

Revestido del nuevo [hombre], el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno.
Colosenses 3:10
Vivimos en un mundo caído, y como resultado, nuestra mente renovada necesita constante limpieza y renovación. El agente principal de Dios para purificar nuestro pensamiento es su Palabra (Jn. 15:3; Ef. 5:26).
El Nuevo Testamento nos llama a la disciplina mental de pensar debidamente. Colosenses 3:2 dice: "Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra". Primera Pedro 1:13 dice: "Ceñid los lomos de vuestro entendimiento, sed sobrios, y esperad por completo en la gracia... cuando Jesucristo sea manifestado". Y a menudo Pablo les dijo a sus oyentes que pensaran debidamente y no fueran ignorantes.
También el Antiguo Testamento nos llama a pensar debidamente. El rey Salomón dij "Si inclinares tu corazón a la prudencia, si clamares a la inteligencia, y a la prudencia dieres tu voz... Entonces entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de Dios" (Pr. 2:2-5).
El conocimiento de lo bueno requiere iniciativa y esfuerzo. Pero si usted es fiel haciendo el mayor esfuerzo, Dios le dará entendimiento (cp. Sal. 119:34).

sábado, 3 de diciembre de 2011

Pensamos muy poco


Pensamos muy poco

Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.
1 Corintios 2:16
Algunos suponen que la preocupación es resultado de pensar demasiado. Pero en realidad es el resultado de pensar muy poco en la dirección correcta. Cuando fuimos salvos, recibimos una nueva mente o manera de pensar. Ahora nuestro modo de pensar está impregnado de pensamientos divinos y sobrenaturales.
El apóstol Pablo dij "Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu. Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz" (Ro. 8:5-6). Gracias al Espíritu de Dios en nuestra vida, pensamos a un nivel espiritual, no a un nivel carnal.
Pablo también dij "Por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención" (1 Co. 1:30). Como Dios nos da su sabiduría, podemos pensar los profundos pensamientos del Dios eterno. 

jueves, 1 de diciembre de 2011

La acción de gracias de Jonás


La acción de gracias de Jonás

Mas yo con voz de alabanza te ofreceré sacrificios; pagaré lo que prometí. La salvación es de Jehová.
Jonás 2:9
Es asombroso que el profeta Jonás diera gracias a Dios mientras estaba en el vientre del gran pez (Jon. 2:1). ¿Cómo reaccionaría usted si estuviera en el lugar de Jonás? Tal vez clamaría: "¿Qué estás haciendo, Dios? ¿Dónde estás? ¿Por qué está sucediendo esto?" Pero Jonás reaccionó de manera diferente: "Invoqué en mi angustia a Jehová, y él me oyó; desde el seno del Seol clamé, y mi voz oíste" (v. 2). Después describió su hundimiento en el mar y la seriedad de su dilema (vv. 3-5)
No obstante, en medio de tan difícil situación, Jonás oró: "Tú sacaste mi vida de la sepultura, oh Jehová Dios mío. Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé de Jehová, y mi oración llegó hasta ti en tu santo templo" (vv. 6-7). Aunque tenía sus debilidades, Jonás demostró una gran estabilidad espiritual en su oración. Confió en el poder de Dios para librarlo si quería. De igual manera, la paz de Dios lo ayudará a usted si reacciona ante las circunstancias con acción de gracias.