miércoles, 17 de julio de 2024

Tipología de Cristo y los diez mandamientos. Parte 2

 Tipología de Cristo y los diez mandamientos. Parte 2

“No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias; ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia. Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.” Romanos 6:12-14.
Los diez mandamientos fueron dados para revelar el pecado del hombre, pero también fue nuestro ayo para llevarnos a Cristo ante la imposibilidad de encontrar una manera de hallar el camino de bendición y salvación por nuestros propios méritos: “De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a fin de que fuésemos justificados por la fe.” (Gálatas 3:24) y llevados a la fe en Cristo, ahora recuperamos el camino de bendición; accedemos a la bendición de tener estos mandamientos.
Pues ahora, bajo la gracia que significa “favor inmerecido”, al recibir a Jesús, Dios cumple esta promesa: “Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo” (Jeremías 31:33).
Bajo la gracia, los diez mandamientos no son por obligación, sino que los cumplimos porque el amor sincero de Cristo está en nuestro corazón y por lo tanto hay obediencia.
Hay un detalle no menor en la manera en que Dios escribió los mandamientos: fueron escritos en tiempo verbal como si fueran promesas por que están escritos en “futuro imperfecto”, por ejemplo dice “no robarás” observemos que NO dice “no robar”, entonces son mandamientos pero están encerrando una promesa de bendición y ahora, bajo el nuevo pacto, mandamientos que podemos acceder y por el poder del Espíritu Santo somos totalmente libres de cumplir. De hecho, el cumplirlos nos dan libertad y bendición.
Israel fue liberada y luego les fue entregada la ley, nosotros fuimos liberados por nuestro libertador Jesucristo y nos fue entregada su gracia: “Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo.” (Juan 1:17) y su gracia es el poder para vencer el pecado como lo dice el versículo de hoy en Romanos 6:12-14. Oración Padre, muchas personas aún no saben que tú nos diste el poder para vencer el pecado y que Cristo mora ahora en nosotros para reflejar todo tu amor, guía a tu iglesia a ser luz y dejar todo legalismo y toda religiosidad, para que anunciemos la libertad que Cristo nos dio para vivir una vida en obediencia a tus mandamientos. Amén

No hay comentarios:

Publicar un comentario