¿Qué voz escuchamos?
Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de lo suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira. Y a mí, porque digo la verdad, no me creéis”. Juan 8:44-45
“En pos de
Jehová vuestro Dios andaréis; a él temeréis, guardaréis sus mandamientos y
escucharéis su voz, a él serviréis, y a él seguiréis”. Deuteronomio 13:4
A veces la
voz que más escuchamos es la nuestra, nuestra voz interna, es quizás bastante
sutil pero muy poderosa, porque tiene el poder de moldear nuestra conciencia.
Por eso lo importante aquí es comprender y permitir que sea Dios quien domine
lo que nos decimos a nosotros mismos.
Si estamos
en los caminos del Señor deberíamos repetirnos constantemente la verdad de su
Palabra en nuestras vidas. Porque es la voz de Dios la que trae vida a nuestro
espíritu y nos asegura lo que somos en Él, santos y benditos, creados a la
imagen de Jesús para buenas obras, para vivir en la plenitud de su Espíritu
llenos de su fruto, como dice Gálatas 5:22-23 “Mas el fruto del Espíritu es
amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza;
contra tales cosas no hay ley. Pero los que son de Cristo han crucificado la
carne con sus pasiones y deseos”.
Pero si nos
encontramos alejados de Dios nuestra voz interna estará influenciada por el
enemigo de nuestras almas, que quiere insertar las mentiras que dicta el mundo,
o los malos consejos de personas que nos rodean. Algunas de esas mentiras fueron
escuchadas desde nuestra infancia, nos convencieron de falsas creencias que
siguen menguando todavía nuestra vida. Está voz lentamente nos llevará a la
muerte.
La Biblia
dice: “Porque cuál es su pensamiento en su corazón, tal es él”. Proverbios
23:7a, en otras palabras, nuestros pensamientos se transforman en palabras y
estas en acciones, porque lo que nos decimos a nosotros mismos se convierte en
nuestra realidad. Si permitimos al Espíritu Santo hablar a nuestro interior nos
llenará de confianza, bienestar y seremos más productivos, viviendo una vida
abundante.
Pero si
dejamos que la voz del enemigo nos dirija, nos conducirá a la destrucción. Como
lo dijo Jesús en Juan 10:10 “El ladrón no viene sino para hurtar y matar y
destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en
abundancia”. ¿Qué voz es la que más estamos escuchando? Oración.
«Señor
Jesucristo, gracias porque tu palabra es verdad y me hace libre. Permíteme
meditar cada día en ella para que tu Santo Espíritu sea influenciando mi vida;
que tus verdades llenas de poder hagan que mis pensamientos permanezcan
alineados a lo que dices que soy. Quiero que tu voz sea más fuerte que la del
mundo y la mía, para caminar en obediencia y en plenitud. En Cristo Jesús.
Amén. Difundiendo el mensaje de
Jesucristo.
¡Hasta lo
último de la tierra! Usa tus redes sociales para ese propósito
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