Descansar. Parte 1
“Venid a mí
todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi
yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y
hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi
carga”, Mateo 11:28-30.
Recuerdo que
en mi juventud uno de los pasajes que más me impactó cuando me compartieron
acerca de Jesús fue el de Mateo 11:28-30, porque en ese instante me pregunté:
¿estoy trabajado y cansado?, ¿soy un joven cansado?, y la respuesta fue que
definitivamente sentía un peso enorme, me sentía cansado de no hallarle sentido
a mi vida, de no saber para dónde iba, de no saber por qué estoy aquí en esta
tierra.
Con el
tiempo, cuando empecé a estudiar la Biblia entendí que este cansancio producto
de la incertidumbre existencial era la falta de Dios en mi vida, puesto que
como dice: “Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen;
pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las
águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán”, (Isaías
40:30-31).
En pocas
palabras, la confianza en Jesús dará nuevas fuerzas, la energía que mueve mi
vida no era mi juventud, era la confianza en Cristo: “Porque así dijo Jehová el
Señor, el Santo de Israel: En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y
en confianza será vuestra fortaleza. Y no quisisteis,” (Isaías 30:15). En la
medida en que lo conocía más por medio de la Escritura, confiaba más en Él y
hallaba sentido a mi vida, encontraba entonces propósito y esto me daba nuevas
fuerzas.
Preguntémonos
en cuáles áreas de nuestra vida no hemos descansado en Cristo para poder hallar
la fortaleza necesaria y así afrontarlas y resolverlas según su voluntad; o en
cuáles áreas reflexionamos si algo en nuestra vida se ha convertido en una
carga enorme y requerimos descansar en Él.
Oración.
«Señor
Jesús, quiero ir a ti, a tus brazos de amor, estoy cansado de tratar de resolver
mi vida en mi fuerza y no lograr nada, por eso descanso hoy en ti y quiero
recibir de tu plenitud, de tu gracia y verdad en todas las áreas de mi vida. Tú
eres el único camino al Padre, quiero recibir a tu Espíritu y ser guiado por Él
para gloria de tu nombre. Amén. Difundiendo
el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo
último de la tierra! Usa tus redes sociales para ese propósito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario