Meditad
sobre vuestros caminos
«Así ha
hablado Jehová de los ejércitos, diciendo: Este pueblo dice: No ha llegado aún
el tiempo, el tiempo de que la casa de Jehová sea reedificada. Entonces vino
palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo: ¿Es para vosotros
tiempo, para vosotros, de habitar en vuestras casas artesonadas y esta casa
está desierta? Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad bien sobre
vuestros caminos. Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis;
bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que
trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto. Así ha dicho Jehová de los
ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos». Hageo 1:2-7
El profeta
Hageo da un mensaje al pueblo de Israel diciéndoles que han cambiado sus
prioridades, pues Dios los sacó de Babilonia con el propósito de reconstruir el
Templo de Jehová, pero han pasado los años y el templo sigue en ruinas. El llamado
fue a reanudar la obra del Señor, y poner en prioridad las cosas del reino de
Dios, así como Jesús dijo en Mateo 6:33 «Mas buscad primeramente el reino de
Dios y su justicia y todas las demás cosas os serán añadidas».
Dios llama
la atención a su pueblo, porque estaban tan centrados en sus problemas y las
pequeñeces de su vida, que no estaban haciendo lo bueno a los ojos del Señor,
pues se habían olvidado que ellos eran parte de su plan, por tanto, los lleva a
reflexionar sobre las cosas materiales, que si bien son necesarias, no
satisfacen el alma y así se trabaje duro su jornal cae en saco roto.
A nosotros
nos ocurre lo mismo, nos cuesta mantener una perspectiva real y eficaz de
nuestra vida como creyentes, tenemos prioridades erróneas, apatía y pereza
espiritual, por ello Dios dijo: «Meditad bien sobre vuestros caminos». Por
tanto es momento de escudriñar nuestro corazón y confrontarnos honradamente con
la Palabra de Dios, porque a nuestro propio parecer podemos creer que estamos
en lo correcto, así dice Proverbios 14:12 «Hay camino que al hombre le parece
derecho; pero su fin es camino de muerte». Y el Señor Jesús le dijo (a Tomás):
«Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí»;
y el profeta Isaías dijo: «Este es el camino, andad por él; y no echéis a la
mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda». Jesucristo es el Camino
a seguir, y hay que tomar una decisión personal de seguirlo, o rechazarlo
porque no hay camino intermedio.
Hermano
acepta en tu corazón a Jesucristo, ten fe y camina por el mejor Camino:
Jesucristo y su Palabra. Oración.
«Señor
Jesucristo, he reflexionado sobre mis prioridades y he meditado sobre mis
caminos, y solo tú eres el Camino perfecto, sólo tú sacias mi alma con tu
Palabra, pues tus estatutos son dulce miel a mi paladar, lámpara a mis pies y
luz a mi camino, por tanto, estarás en el primer lugar de mi corazón. Amén. Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo
último de la tierra! Usa tus redes sociales para ese propósito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario